CARTAS A GARDEL DE LAS COMPAÑÍAS DISCOGRÁFICAS
(Por Héctor Lucci)
Como bien sabemos, en el año 1912 Gardel (ya con
ele) realiza sus primeras catorce grabaciones para siete
discos dobles en el bazar del italiano Don José Tagini
ubicado en la esquina de Avda. de Mayo y Perú, representante
entonces de la casa Columbia de EE.UU., fundada en el año
1888 por dos estenógrafos de la suprema corte en
los distritos de Maryland y Columbia. De ahí su
nombre de marca. Dichos discos anuncian su aparición
en Buenos Aires el 28 de mayo de 1913 por la propia Casa
Tagini, donde en la etiqueta de los mismos se lee: Carlos
Gardel “Artista del Teatro Nacional” Discos
Columbia Récord.
La guerra mundial iniciada en el año siguiente perjudicó e
interrumpió por completo el trabajo del laboratorio
de grabaciones de la casa Tagini, no solamente con Gardel
sino también con todo el elenco que componía
su interesante catálogo y trajo como consecuencia
más tarde, la quiebra comercial de la casa Tagini.
La misma suerte le tocó a Don Alfredo Améndola
y por el mismo motivo pero aún peor, porque enviaba
las matrices a Alemania para la producción de sus
discos Atlanta que debían venir a Buenos Aires cruzando
peligrosamente el Atlántico. Max Glücksmann
compra en el remate de la casa Atlanta la máquina
grabadora que A. Améndola había adquirido
en Alemania y con ella produce los primeros discos Roberto
Firpo y Gardel Razzano (ésa era la marca) grabados
en 1917 en Buenos Aires y prensados en Brasil. Estos discos
no llevaban la marca Odeón todavía por no
poseer Glücksmann licencia autorizada. Siguieron a
los discos Gardel-Razzano los discos Nacional y después
del tratado de Versalles, los discos Nacional Odeón.
En 1927 Gardel se encontraba en España actuando
y quisiera yo imaginar cuál sería su sorpresa
al recibir ahí, la invitación de la Columbia
Graphophone Company para volver a ser artista de ése,
su primer sello discográfico y recordar cuando él
con su guitarra cantó para su primer disco “Sos
mi tirador plateado” frente a una bocina en una simple
pieza del bazar de la Avda. de Mayo y Perú.
En 1929 la Cía. Víctor aquí en Buenos
Aires, también ofrece a Gardel su sello mientras él
se encontraba en París. José Razzano fue
el encargado de estipular el acuerdo con la Víctor,
pero no resultó favorable la propuesta por pesos
mediante.
Y ahora cedo el paso a tres correspondencias recibidas
por Carlos Gardel en Europa y que me proporcionaron la
idea del título. Puede notarse en cualquiera de
ellas el trato cordial que le dispensan aún en términos
comerciales; y por último agrego con estima la definición
de un operario español que trabaja en la empresa
Odeón, pero en Badalona, donde se manufacturaron
los discos cuyas grabaciones se realizaron en Barcelona.
Es destacable lo que observa y resume este operario español: “Admiramos
su arte más que cualquier otro, por ser puro y exclusivo
suyo”. Aquí las transcribo en forma completa:
Carta de COLUMBIA fechada en San Sebastián, el
9 de diciembre de 1927
Sr. Don Carlos Gardel
Teatro Romea
Madrid.
Muy Sr. Ntro:
Rogamos a Ud. nos diga hasta cuándo estará en
Madrid pues hemos escrito a nuestro Delegado Don José Fernández
Grados para que al regreso de Valencia visite a Ud. con
el fin de llegar a un acuerdo referente a impresiones
que deseamos hacer de Ud. para esta Compañía.
Quedamos de Ud. affmos y s.s.q.b.s.m
La misma empresa remite al cantor una nueva misiva,
fechada en San Sebastián el 14 de diciembre de
1927.
Sr. Don Carlitos Gardel
Palace Hotel
Madrid
Muy Sr. Ntro:
Nos favorece su atenta grata 13 d/c y sentimos que sus
actuales compromisos no le permitan hacer impresiones
en nuestra Compañía.
Nos interesa conocer la fecha en que Ud. estará libre
de sus compromisos y también tener noticias suyas
para ver si podemos organizar con Ud. dichas impresiones
en el país que se encuentre, pues Ud. conocerá que
nuestra Compañía está representada
en todo el mundo y lo mismo podemos efectuar impresiones
en América como en Europa.
Le deseamos a Ud. muchos éxitos en su carrera
artística y confiamos tener el placer de contarle
entre nuestros muchos y selectos artistas y quedamos
de Ud. affmos y s.s.q.b.s.m.
La otra epístola mencionada carece de fecha,
no obstante lo cual podríamos ubicarla en la vida
de Gardel sin mayores dificultades.
Sr. Don Carlitos Gardel:
Distinguido amigo: Sirvan estas líneas para pedir
un insignificante favor.
Vería con magnificencia que sirviera poner un
autógrafo en estas fotografías que como
verá, son de su persona, tal vez Ud. dirá ¡vaya
un impertinente! Pues no es así, en breves palabras
quedará explicado.
Somos algunos amigos que admiramos su arte más
que cualquier otro por ser “puro y exclusivo suyo” las
expresiones que Ud. pone en sus canciones imponen a nuestros
sentimientos, no he tenido el placer todavía de
escucharle pero sigo paso a paso todas sus estupendas
canciones que más de alguna vez han hecho brotar
lágrimas de mis ojos.
Mire si me han gustado y excitado, que hasta escribí una
poesía dedicada a Ud. (y eso que no soy poeta)
pero que no la expongo aquí por no hacerme pesado.
Sus canciones me gustan todas! Pero entre ellas las más
bonitas para mí son: “Soy una fiera” porque
trata de carreras de caballos y que Ud. está muy
aficionado a ellas, luego “El Sueño”, “Gajito
de Cederrón”, “Pedime lo que quieras”, “Langosta”, “Silbando”, “Carnaval”.
Le admiro yo también porque a Ud. (según
leí) los futbolistas Zamora y Samitier le gustan
mucho, y como yo también lo soy por eso le admiro
más.
Yo le diré el secreto por que conozco todas sus
canciones pero: ¡¡¡le ruego encarecidamente
que se abstenga de decirlo en las personas que intervienen
en ello!!!
Yo trabajo en “Odeón” (de Barcelona)
que la fábrica está en Badalona, y mi trabajo
está en emplear y distribuir sus sellos a los
discos que Ud. figura como cantor y a veces como autor ¿lo
comprende verdad?
Yo le hubiera pedido una fotografía exclusiva
suya (éste es el favor más arriba indicado),
pero por temor que me la negara le mando estas para que
ponga unas palabras de agradecimiento, en una pondrá el
nombre de “Carlos del Río” que es
un “amigazo” mío, que él y
su novia que se llama “Carmen” deliran por
oírlo, y el otro, que soy yo y que le pido perdón
por mi atrevimiento.
Ricardo Ramentol
P.D. Le pongo un sello para que me conteste pronto, y
mi dirección es:
Ricardo Ramentol
Calle de la Industria 63
Badalona
(Artículo publicado en la revista “CLUB
DE TANGO” N° 55, julio-agosto de 2002, páginas
8 y 9)
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